La sensualidad es una facultad que posee el ser humano, que se exterioriza en mayor o menor grado de acuerdo a su personalidad, durante toda su vida y está estrechamente unida a la sexualidad.
Los hombres y las mujeres sensuales emanan estímulos capaces de excitar o deleitar a quienes son receptivos a sus señales. También saben captar y disfrutar plenamente de todos los momentos de placer que se les brinda.
El poder sensual exterior está formado por varios aspectos, que son:
1.-Tu manera de ser, que indica quién eres realmente y el entorno del que provienes. Según sea ésta, provocará envidia o pena. La mayoría de veces, lo que aparentamos es un fiel reflejo de nuestro interior, es muy difícil aparentar lo que no se es, aunque mucha gente lo hace. No te dejes llevar por las apariencias y recuerda que si decides construir una personalidad para agradar a los demás, es muy probable que se derrumbe al primer contratiempo. Intenta conocerte a ti misma, descúbrete y aprende a confiar en ti mismo. Solo una buena autoestima te convertirá en una persona envidiada y querida por todos.
2.- Tu forma de vestir. Aunque se dice “El hábito no hace al monje”, pero actualmente se demuestra lo contrario: estamos juzgando constantemente a las personas por su forma de vestir. Por eso es que tu forma de vestir es “una de tus tarjetas de presentación que te clasificará ante los ojos de los demás”. La mayoría de personas se visten de acuerdo con el modo en el que se desenvuelven, y aunque es difícil dar consejos en este aspecto, estas recomendaciones pueden ayudarte:
- Intenta vestirte acorde con cada situación, pero sin renunciar a tu estilo propio.
- Vestir a la moda, sin exagerar, ayuda bastante a causar una buena impresión.
- Los colores vivos y claros suelen favorecer más que los apagados y oscuros.
- Intenta vestir siempre prendas que le sean cómodas y acordes a tu estilo. No te fuerces, te sentirás incómodo, y lo proyectarás a los demás.
3.- Tu manera de hablar, recuerda el refrán que dice "Por la boca muere el pez". Trata de hablar despacio y vocalizando, al hablar deprisa, muchas veces no se pronuncian bien las palabras o te “las comes”, y esto puede provocar tensión en quien te escucha pues hace un esfuerzo por entenderte. Un buen sistema para moldear tu voz y conseguir que sea más sensual, es ensayando con una grabadora. Intente grabar distintas clases de textos y escúchate varias veces, o alguna conversación con un amigo para que sepas cómo se te oye normalmente. Encontrarás defectos y detalles que cambiar, lo que te ayudará a mejorar en este aspecto.
4.- Tu forma de mirar, pues los ojos dejan ver tu estado anímico. ¿Has sentido como uno de los aspectos que más atraen hacia una persona es cómo ella puede demostrarte su interés a través de su mirada? Tú puedes hacer que tu mirada sea intensa, que refleje tu deseo y sensualidad. Una forma de entrenarte es practicar delante de un espejo y tratar de demostrar tus emociones a través de tus ojos.
5.- Tu de caminar, si lo haces con la cabeza baja y los brazos caídos, das la impresión de sufrimiento, y provocas lástima o pena. Ahora si tus gestos son bruscos y secos, de seguro inspiras más miedo que amor. Por esto es muy importante la forma en que caminas, la forma en que haces que tus gestos combinen con lo que dices y piensas, pues si no van al mismo tono puedes estar enviando mensajes contradictorios
Hazte notar pero sin necesidad de llamar la atención, deje que se despierte la curiosidad en los demás por conocerte, algo que es muy importante, para dar el siguiente paso, dejar conocer tu sensualidad interior.
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